La circuncisión neonatal comenzó a realizarse desde los inicios del siglo XX, fundamentalmente en familias acomodadas de los países anglosajones, aludiendo a razones higiénicas y médicas para prevención de determinadas enfermedades. Si bien esta práctica alcanzó más auge en EEUU también fue practicada ampliamente en el Reino Unido donde hasta un 20% de los niños recién nacidos de clases altas eran circuncidados en la década de 1950. Pero este proceder fue perdiendo popularidad en las familias británicas de forma progresiva desde los años 70 al considerarse un procedimiento innecesario, cuyos riesgos superaban a los pretendidos beneficios. Al hilo de estas tendencias surgidas en la sociedad inglesa durante el pasado siglo, las razones de la realeza británica para circuncidar a los hijos varones deben ser consideradas como producto de una decisión propiamente personal sin que obedezca a significados profundos, religiosos o a ritos arcaicos, sino basada en criterios exclusivamente higiénicos y médicos. No cabe interpretar, por tanto, ningún tipo de vínculo de la monarquía inglesa con la religión judía. Según el diario The Telegraph la circuncisión en la Casa Real británica “es una de las rarezas de la familia real, compartida por la mayoría de las clases altas inglesas, que durante muchas generaciones han circuncidado a sus hijos varones” y el hecho de que se utilice habitualmente un mohel para su realización, según este diario, no se debe ser atribuido a motivos religiosos.
jueves, 26 de septiembre de 2024
La cuestionada tradición de la circuncisión neonatal en los descendientes varones de la familia real británica
lunes, 8 de julio de 2024
La circuncisión del príncipe de Asturias Alfonso de Borbón y Battenberg como reveladora del diagnóstico de hemofilia
El rey Alfonso XIII de España se casó el 31 de mayo de 1906 con Victoria Eugenia de Battenberg, La nueva reina, llamada familiarmente Ena, era nieta de la reina Victoria del Reino Unido e hija de la princesa Beatriz, hermana del entonces rey británico Eduardo VII. María Eugenia fue bien acogida por el pueblo español y preferida entre otras candidatas centroeuropeas. Su elección fue el resultado de un matrimonio por amor y por conveniencia diplomática, debido a su vinculación con la monarquía británica, aunque la dinastía Battenberg no era de las más ilustres dentro de esta amplia familia real.
El enlace con Victoria Eugenia, no obstante, suponía la sería amenaza para la transmisión de la hemofilia a sus descendientes. Por herencia de la reina Victoria, esta enfermedad había entrado en las casas reales de Hesse, Sajonia-Coburgo y Gotha, Románov y, por supuesto, también en la casa real británica. La hemofilia, una enfermedad de transmisión hereditaria que impide que se produzca la adecuada coagulación de la sangre, por aquel entonces tenía muy grave pronóstico por el riesgo de producirse una hemorragia masiva, incluso después de recibir un leve traumatismo, lo que suponía una continua amenaza para la vida del afectado. No se disponía de ningún tratamiento eficaz y, aunque generalmente se manifiesta clínicamente en los varones, las mujeres actúan como transmisoras de la enfermedad. En aquella época no era posible detectar la condición como portadora en la mujer, pero había indicios de sospecha en el caso de Ena ya que dos de sus tres hermanos eran hemofílicos. Se ha debatido mucho sobre si el rey tenía conocimiento o no del riesgo de la transmisión de esta enfermedad genética antes de contraer matrimonio con Victoria Eugenia. Casi todos los historiadores coinciden en que Alfonso XIII había sido debidamente informado sobre este problema. La infanta Eulalia de Borbón, tía del rey, aseguró que tenía plena información de este riesgo potencial. La reina madre, María Cristina, conocedora y consciente de esta circunstancia, intentó disuadir a su hijo sobre la conveniencia de este enlace para evitar problemas con la descendencia, pero nada pudo conseguir pues el rey estaba totalmente ensimismado con Ena.
lunes, 29 de abril de 2024
Disfunción sexual del rey Luis XVI de Francia. Posible resolución con la circuncisión
Luis
XVI nació el 23 de agosto de 1754 con el nombre de Luis Augusto. Fue rey de
Francia entre 1774 y 1792 tras el fallecimiento de su abuelo Luis XV. Se había
convertido en delfín de Francia por la muerte de su padre, Luis de Francia, y
de sus dos hermanos mayores que le precedían en los derechos dinásticos. Fue el
último monarca francés con poderes absolutos tras el triunfo de la Revolución
Francesa. Con el propósito de aliarse con Austria para poner fin al poderío
creciente de Gran Bretaña y Rusia, decide casarse el 16 de mayo de 1770 con
María Antonieta, archiduquesa de Austria e hija menor de Francisco I, emperador
del Sacro Imperio Romano Germánico, y la emperatriz María Teresa de Austria. La
esposa del delfín fue rechazada desde el principio por la corte francesa, a la
que dieron el apelativo de Perra austriaca. También se ganó gradualmente
la antipatía del pueblo, que la acusaba de derrochadora, presumida, libertina y
de influir a su marido en favor de los intereses austriacos, lo que le valió el
mote de Madame Déficit y Loba austriaca. El matrimonio no fue
consumado hasta siete años después de la boda, cuando la pareja ya había
ascendido al trono, y este retraso fue relacionado con una posible fimosis que
afectaba al rey, aunque también podía haber influido la inmadurez y falta de educación
sexual de la jovencísima pareja. Otras posibles causas invocadas fueron una
cierta aversión inicial de Luis hacia el sexo en consonancia con su
personalidad apática y timorata favorecido, además, por una educación religiosa
estricta y una infancia difícil, como también a la existencia de una disfunción
eréctil por un posible hipogonadismo o diabetes mellitus. Después de varias
consultas médicas y la recomendación de distintas medidas terapéuticas, entre
las que incluye una posible circuncisión, se iniciaron por fin relaciones
conyugales satisfactorias que tuvieron como resultado el nacimiento de cuatro
hijos.
Luis XVI tuvo un reinado convulso debido al déficit económico acumulado por los dos reinados anteriores. El descontento social de las clases media y baja provocó una fuerte oposición a la aristocracia y a la monarquía absoluta, de la que Luis y su esposa se veían como representantes y símbolos de la tiranía del Antiguo Régimen. El aumento de las tensiones estuvo marcado por una serie de disturbios violentos en París, como la toma de la prisión de la Bastilla el 14 de julio de 1789, que obligaron al monarca a reconocer definitivamente la autoridad legislativa de la Asamblea Nacional revolucionaria. La popularidad del rey se deterioró progresivamente después del intento de huida del país en junio de 1791, con perspectivas de buscar apoyos en el extranjero, consumándose así cada vez más la posibilidad de deponer a los reyes y establecer un estado republicano.
martes, 19 de marzo de 2024
La circuncisión en la historia. Rito, religión y medicina
sábado, 23 de diciembre de 2023
El adolescente Pablo Picasso durante su estancia en A Coruña (1891-1895): Mecenazgo del Dr. Ramón Pérez Costales
Pérez Costales mantuvo una fuerte relación con la familia Ruiz Picasso actuando como un verdadero mecenas del adolescente Pablo Picasso durante todo el tiempo que permaneció en la ciudad herculina (1891-1895), después de que su padre, José Ruiz Blasco, obtuviera la plaza de profesor en la Escuela de Bellas Artes coruñesa. Costales, conocedor del potencial artístico de Pablo, le daba continuamente ánimos para que desarrollara sus aptitudes pictóricas, premiándole con dinero por las obras que aquél le pedía y consiguiendo que pudieran materializarse las primeras exposiciones públicas de las obras del jovencísimo pintor malagueño. Asimismo, tuvo que intervenir como médico de la familia del pintor en unos momentos trágicos al haber contraído la difteria Conchita, la hermana pequeña de Pablo, no siendo posible su curación falleció cuando contaba con solo siete años de edad.
lunes, 18 de diciembre de 2023
Dr. Ramón Pérez Costales mecenas de Pablo Picasso durante su estancia en A Coruña (1891-1895): Biografía de un médico polifacético
El médico Ramón Pérez Costales fue una figura de gran relevancia en la sociedad coruñesa de finales del siglo XIX. A él se debe la creación de Instituto de Vacunación contra la viruela, el primero de su tipo fundado en Galicia, así como también del Colegio Médico de A Coruña del cual fue su primer presidente. De personalidad inquieta, formó parte muy activa en la política siendo el mayor referente del republicanismo federal en A Coruña donde fue diputado de las Cortes en varias ocasiones alcanzando su mayor proyección durante la instauración de la I República en 1873. Durante la presidencia republicana de Pi y Margal fue nombrado ministro de Fomento. Con la llegada de la Restauración monárquica se fue apartando progresivamente de la política para dedicarle más tiempo a las labores filantrópicas que, por otra parte, vino desarrollando a lo largo de toda su vida. Su participación fue decisiva para la creación de varias iniciativas benéficas como una Escuela de Párvulos para niños pobres o la Cocina Económica para atención de los indigentes. Igualmente fue destacada su contribución para la creación de la Real Academia Galega en 1905. Además, también hizo incursiones en el mundo de las letras publicando libros de poemas e incluso una obra de teatro, aunque sin mucha fortuna.
Tuvo una estrecha amistad con la insigne escritora Emilia Pardo Bazán, a la que sirve de inspiración para la creación literaria del personaje del doctor Moragas que incluye en varias de sus novelas. En la última década del siglo, Pérez Costales se convierte en el anfitrión de la familia Ruíz Picasso cuando el padre del pintor malagueño se traslada a A Coruña para ocupar su plaza como profesor en la Escuela de Bellas Artes. La admiración que Costales siente por el talento artístico que adivina en el adolescente Pablo, hace que fomente sus actividades artísticas gratificándole económicamente por los encargos que le propone y se encarga de organizarle las primeras exposiciones públicas de sus cuadros durante su estancia en A Coruña.
domingo, 12 de marzo de 2023
Isabel Zendal Gómez: Primera enfermera de la historia en misión internacional. Su papel en la Expedición Balmis para extender la vacuna contra la viruela en los territorios españoles de Ultramar
lunes, 16 de enero de 2023
La Expedición Balmis o Real Expedición Filantrópica de la Vacuna contra la viruela en los territorios españoles de Ultramar (1803-1812): Primera misión de salud pública en la historia a escala internacional
La lucha contra la viruela ha sido una constante de la historia a lo largo de los siglos. El carácter contagioso de esta enfermedad vírica causante de pandemias recurrentes, de distribución universal y con alto riesgo de mortalidad y de dejar secuelas muy incapacitantes hizo que fuera una de las enfermedades más temidas de las que ha padecido la humanidad por lo que se denominó “el ángel de la muerte”. Desde la más remota antigüedad se trató de prevenirla mediante la administración a personas sanas de fluidos procedentes de pústulas o costras de enfermos infectados. Este proceso, conocido como variolización, aunque tenía eficacia en muchos casos, no estaba exento de desarrollar la enfermedad en su forma grave e incluso la muerte. Un paso decisivo fue dado por Edward Jenner quien en 1796 consiguió las primeras inmunizaciones por inoculación de linfa procedente de las pústulas de la viruela contraída por las vacas que ocasionaba una forma clínica muy benigna de la enfermedad quedando las personas inoculadas inmunizadas para siempre al contagio de la viruela humana. Desde este momento se comenzó en Europa e inmediatamente después al resto del mundo la vacunación a gran escala siguiendo el método de Jenner.
En España pronto llegaría la vacuna comenzándose las primeras vacunaciones contra la viruela en el año 1800. Para entonces, en el vasto imperio español también se producían continuos brotes de la enfermedad que diezmaban a la población. La Corona española no era indiferente a esta situación y, más bien al contrario, se mostraba muy receptiva para resolver las continuas demandas de los gobernantes de los territorios de ultramar. Después de un proceso de deliberación del Consejo de Indias asesorado por los médicos de Cámara, el monarca español Carlos IV aprueba un ambicioso y complejo proyecto para llevar la vacuna hasta la América hispánica y Filipinas, que será conocido por el nombre de Real Expedición Filantrópica de la Vacuna (REFV), una misión que precisará ser mantenida durante un período de ocho años y medio, de noviembre de 1803 a mayo de 1812, para alcanzar los objetivos propuestos. El proyecto persigue que la vacuna se distribuya por todos los territorios a la mayor población posible, se administre de forma totalmente gratuita a cargo del erario público y tenga carácter universal sin distinciones de raza, sexo ni condición económica ni social.
lunes, 4 de julio de 2022
Cáncer de escroto de los deshollinadores. Primer cáncer ocupacional reportado en la historia por Percivall Pott en 1775
Los pacientes descritos por Pott que
estaban afectados por el cáncer escrotal eran generalmente jóvenes, con edades
comprendidas entre los 30 y 40 años, y que trabajaban o habían trabajado como
deshollinadores. En la Inglaterra del siglo XVIII, para las labores de
limpieza de las chimeneas se utilizaban habitualmente niños porque su menor
corpulencia facilitaba el acceso al interior de las mismas. Con frecuencia
estos niños realizaban el trabajo desnudos o semidesnudos por lo que
impregnaban todo su cuerpo con el hollín contenido en los conductos. El hecho
de que el tumor se presentaba después de la pubertad hacía sospechar que debía
pasar cierto tiempo desde la exposición al hollín y el desarrollo de la
enfermedad, en lo que hoy se denomina período de latencia. Henry Butlin en 1892
llamó la atención sobre la baja frecuencia de este cáncer entre los
deshollinadores de otros países europeos, lo que atribuía a unas mejores
medidas preventivas respecto a los deshollinadores británicos, al estar
provistos de ropajes ceñidos que cubrían enteramente el cuerpo, de la cabeza a
los pies, lo cual evitaba que el hollín entrase en contacto con la piel.
martes, 5 de abril de 2022
Santos protectores de las enfermedades de riñón, vías urinarias y venéreas en la iglesia cristiana: San Liborio. San Zoilo. San Fiacro
Para las enfermedades venéreas no existe un santo protector determinado, seguramente por su consideración de enfermedad indigna por la iglesia, aunque posiblemente San Fiacro sea el más venerado para esta finalidad. También son invocados contra las enfermedades de transmisión sexual San Bricio, San Jorge, San Roque, San Jacobo, San Dionisio y San Apolinar de Rávena. Mención especial merece el santo cordobés San Zoilo como protector de las enfermedades renales a causa de su martirio incluyendo la extracción de sus riñones.
viernes, 25 de marzo de 2022
Santos patronos de la Medicina y la Cirugía en la iglesia cristiana: San Lucas. San Cosme y San Damián. San Pantaleón
La
iglesia cristiana declara a un santo como patrono cuando actúa como defensor,
protector o amparador de un pueblo o una congregación religiosa o civil. En el
campo de la medicina, existen varios santos y santas que tienen este rol y cuyo
conocimiento es de interés no solamente religioso sino también médico y cultural.
Si bien quedan definidos unos santos específicos como protectores de alguna
determinada enfermedad o dolencia, en el credo cristiano se considera que
cualquiera que sea el santo de devoción del creyente, éste puede igualmente
interceder para protegerle de cualquier enfermedad. El poder curativo atribuido
a los santos patronos podía ser solicitado en cualquier lugar dentro de la
iglesia, pero en algunas regiones determinados santos eran particularmente
venerados, sobre todo por su vinculación histórica a la localidad o porque en
estos lugares se encontraban algunas de sus reliquias. De los primeros santos
del cristianismo sólo se conocen algunos datos por la historia y sobre todo a
través de la leyenda y, por lo tanto, es difícil determinar qué hay de cierto y
fabulación en el relato. No obstante, en la actualidad se ha reducido mucho el
ritual de la invocación de los santos para su intercesión en la cura de
enfermedades debido al gran desarrollo que ha experimentado la medicina y la
cirugía en los últimos siglos lo que ha posibilitado un tratamiento racional y
efectivo de las enfermedades basado en el conocimiento científico.
martes, 22 de febrero de 2022
El doctor Romano. Especialista e instructor real para el tratamiento del mal de retención de orina en la Corte de Felipe II. Su visita a Galicia en 1565 y 1566
jueves, 30 de diciembre de 2021
Enrique IV de Trastámara (1425-1474), llamado El Impotente. La disfunción eréctil que facilitó la sucesión al trono de Castilla de su hermanastra Isabel la Católica
Enrique IV de Castilla nació en Valladolid el 5 de enero de 1425. Era hijo de Juan II de Castilla y de la prima hermana de éste María de Aragón, hija del rey Juan II de Aragón, y hermano paterno de Isabel, que se proclamó reina a su muerte, y de Alfonso, que le disputó el trono en vida. Fue rey de Castilla durante un periodo de veinte años, desde 1454 hasta su muerte en 1474. Por algunos historiadores se le dio el apelativo de El Impotente debido a las continuas alusiones realizadas en vida sobre esta condición y la discutida paternidad de su hija Juana. También fue acusado de homosexual y voyerista, aunque en aquel entonces eran habituales estos calificativos entre nobles y reyes en un intento de desprestigiar a rivales y enemigos. Por ello es difícil desentrañar que parte fue realidad y que parte fueron rumores vertidos por sus numerosos y poderosos enemigos políticos, que aprovecharon la existencia de una posible enfermedad subyacente del monarca para erosionar su imagen y lograr cambiar la línea sucesoria.
Fue uno de los monarcas más controvertidos del periodo inmediatamente anterior a la edad moderna. Su dificultad para procrear, sus numerosos conflictos con la nobleza y el hecho de que se rodeara de favoritos, a los que colmó de favores y prebendas, convirtieron a Enrique IV en un rey entre sombras que llegó a ser, incluso, desposeído temporalmente de su corona. Su prolongado reinado estuvo marcado por sus limitadas cualidades como regente y por la gran oposición que encontró dentro de las filas de la nobleza más poderosa de su reino, lo cual provocó un clima de inestabilidad política que desembocó en una sucesión de levantamientos armados de distintas facciones nobiliarias contra la autoridad del rey. No menos importante fue para Enrique IV mantener el difícil equilibrio entre los diferentes reinos hispánicos -Castilla, Aragón, Navarra y Portugal- que generaban permanentes tensiones y conflictos bélicos que apenas podían soslayarse con políticas de matrimonios entre las familias reales y de alianzas comunes para conseguir la ansiada victoria final sobre los musulmanes, reducidos en este momento histórico al reino nazarí de Granada, después de un largo y agotador proceso de reconquista.